A las 18 me pasan a buscar por casa. Bajamos unos 100 metros por la carretera Irún pequeño parking sale la senda de acceso a la ferrata. Bajamos por la estrecha senda hasta encontrar el cable donde empieza la ferrata. Preparamos todos los bártulos y a las 6:20 estamos tocando hierros. Unos metros descenso vertical para luego meterse en diagonal siempre en descenso hasta dar para mí con el paso clave de la Via Ferrata. Este paso consiste en un paso en diagonal descendente por debajo de un pequeño techo y hay que alargar mucho el pie para para apoyarse en un mini puente tibetano. Continúa la senda en horizontal hasta hablar con un puente tibetano. Preciosas vistas de la salida del barranco costechal y del puente sobre Panticosa. Otro paso horizontal entre la gente grande estatura nos resulta bastante incómoda si hay que sacar el culo bastante al patio. Este paso acceso al segundo de los puentes tibetanos igual de bonito que el otro con un patio impresionante. Un corto descenso nos dejan un bosque y subimos hasta casi la carretera de Panticosa a la cual no descendemos. 45'. Como nos ha sabido a poco hay que probarla decidimos volver por la ferrata esta vez ascendiendo por ella. La cosa cambia bastante el paso después del segundo puente tibetano si eres muy alto cómo es mi caso apenas ves las grapas en los pies pero sin dificultad. Pasado el primer puente tibetano comienza el ascenso diagonal ascendente pasos raros y en la zona del Mini puente tibetano hay que apretar para subir ya que la grapa queda bastante alta sin problemas a partir de aquí se llega fácilmente hasta la entrada de la Ferrata. Ferrata muy muy divertida con mucho patio la que en algunos tramos hay que apretar. Está algún día se convertirá en un clásico. A las 8 estamos fuera. Ha ido con Loli.
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