Amanece soleado pero con mucho aire, decidimos ir a Morgiou. Por
suerte al ser temporada baja la carretera está abierta. Cuando llegamos a la
Calanque de Morgiou vemos que no vamos a poder escalar, hace frio y aire,
decidimos dar un paseo. Son las 10 de la mañana cuando empezamos andar. La
senda muy bien marcada va paralela a la cala, ascendiendo suavemente llegamos a
un collado, nos adentramos en la península y llegamos al Cap de Morgiou 45´.
Bonito lugar, aquí el aire impresiona, da hasta vértigo asomarse a los
acantilados. Nos parapetamos un rato en un antigua fortificación, almorzamos
damos una vuelta por el cavo. Volvemos por el mismo camino un poco frustrados
por no escalar. Volvemos al coche en un agradable paseo. Comemos y decidimos ir
a una de las vías por la que hemos pasado, parece estar al abrigo del aire.
La aproximación la hacemos en 15 minutos
aun confundiéndonos de camino. Preparamos todo y a las 2.30 empezamos a
escalar.
L1: V Le da Cristophe: largo muy pulido,
la mayor dificultad está a la salida, no por lo difícil, sino por lo pulida de
la roca, primero por escalada vertical y luego unas placas finas y por fin un
paso horizontal con ambiente.
L2: 3+ le doy. Largo discontinuo
primero una travesía para luego coger una chimenea fácil, por vetas de
diferente roca.
L3 +L4: V Le da Cristophe. Chimenea muy
bonita, hay que moverse por ella para salvar un paso fino, bien protegida. Se
sale a un collado y por placas fáciles al final de la vía.
El final de la vía es el infierno, un aire
que no deja ponerte de pie, buscamos una bajada cómoda pero no parece existir.
Terminamos repelando por la misma vía, con miedo a que el aire nos enrede las
cuerdas.
A las 4.30 estamos en el coche, nos ha
costado más bajar que subir.
El paseo lo he hecho con Almudena y Cristophe.
La escalada solo con Cristophe.
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