A las 8.30 salimos de Sabi, paramos en Ainsa a tomar un café,
preguntamos como es mejor llegar al pueblo. No son capaces de indicarnos.
Tiramos de Google maps y nos indica perfectamente la ruta en coche a seguir. A
las 11 de la mañana llegamos al Pueblo abandonado de Lapenilla. Preparamos los bártulos
y nos acercamos hasta la cabecera.
La aproximación es casi inmediata, no esta
muy marcada pero es evidente, hay que bajar por unos campos a la izquierda del
pueblo a dar con la raya caliza que se ve. Nos ponemos los trajes y "pa
dentro", en el primer resalte ya se ve la tónica del barranco. Vamos descendiendo
muy tranquilos saboreando el barranco, a tramos muy estético, el agua fría,
pero el débil caudal hace y las marmitas colmatadas hacen que no nos mojemos la
parte superior. Estrechos, marmitas, resaltes, meandros esta el la tónica del
barranco. El rapel de 38m es muy bonito, sobre todo el acceso a el. Un último
rapel de 20m nos deja muy buen sabor de boca. Se no ha hecho corto dos horas de
barranco. Salimos de el por una delicada senda, delicada a causa del barro.
Vamos a dar a un campo donde nos quitamos los trajes al sol.
El retorno lo hacemos en bañador, el día
da para ello, vamos dirección al pantano por una senda, cuando salimos a una
pista la seguimos dirección norte hasta dar con una casa unos metros después un
cartel nos manda de nuevo al pueblo, una cómoda senda sube sin grandes cuestas
al pueblo. El sitio es magnifico. Comemos y de vuelta para casa eso si,
parando a tomar una cerveza en Ainsa. He ido con Nacho.
Nacho Rapel de 38m |
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